Frente a las interesantes fotografías que ofrece Sotheby’s en su sede neoyorkina, Fernando Durán y Subarna se decantan por obras regionalistas, de gusto más conservador, en una de las últimas citas antes del descanso por la Semana Santa. En la sección de Remates comentamos las últimas ventas de la feria de TEFAF en Maastrich.
Tras la subasta el pasado día 18 de la colección de Gianni Versace en Sotheby’s Londres por valor de 7,4 millones de libras, y las distintas ventas de pintura antigua y moderna en TEFAF, de las que hablamos en la sección de remates, parece que el mercado se ha animado en estas últimas semanas. Desde luego, la lectura es nítida: los coleccionistas siguen buscando piezas de calidad e interés para comprar por gusto o como alternativa a otras inversiones menos estables.
En cualquier caso, mientras la oferta aumenta los compradores disminuyen, y ello llevará como paso lógico a una cierta depreciación del valor de muchas piezas, especialmente las de calidad e interés mediano-bajo. Y las casas que no hagan entender esto a sus clientes, obtendrán unas ventas muy bajas.
La semana tiene tres momentos: la subasta de fotografías en Sotheby’s Nueva York el día 30, la oferta de pintura del siglo XIX en Fernando Durán el día 1 y la de artistas catalanes finiseculares en Subarna el día 2.
En Nueva York destacan unas pocas fotografías. Con una estimación de 200.000-300.000 dólares, se ofrecen Woman in Moroccan palace (Lisa Fonssagrives-Penn) (fotografía sobre gelatina, 1951, impresa en 1983, 33/40, 50,5 x 49,6 cm) de Irving Penn (1917), y un retrato de Lucia Moholy
(tomada en los años 20, 38,4 x 28, 5 cm) de Laszlo Moholy-Nagy (1895-1946).
Si la primera es una foto de la bella Lisa Fonssagrives, con apenas cuarenta años, realizada justo un año después de su matrimonio con el fotógrafo, como parte de su trabajo para Vogue publicado en enero de 1952 y titulado Moroccan Handbook, la segunda es una toma espontánea y natural, con un curioso juego de luces y sombras, de Lucía, la primera mujer de László Moholy-Nagy, y que el propio autor seleccionó como de sus mejores 60 obras para la antológica que tuvo en Berlín en 1930.
Por último, además de una cantidad importante de obras de Edward Weston, Paul Strand o Ansel Adams, sobresale Child with toy hand grenade in Central Park, N. Y. C. (firmada, fechada, titulada y numerada 36/75 por su hija Doon Arbus, 1962, 37,5 x 36,8 cm, 70.000-100.000 dólares) de Diane Arbus (1923-1971).
El día primero de abril, Fernando Durán ofrece algunas piezas interesantes. Sobresale el buen retrato fechado en Madrid en 1920 de la mano del pacense Eugenio Hermoso (1883-1963): En la 
fiesta de Tentudia (O/L, 140 x 94 cm), donde su hija Rosario posa entre una mezcla de folclorismo y modernidad. Los 52.000 euros de la salida la hacen exclusiva para pocos coleccionistas…
Del granadino José María López Mezquita (1883-1954), una temprana y de calidad alegoría de La música (O/L, 1911, 112 x 87 cm, 25.000 euros), anterior a su peculiar estilo de manchas; y Projet de chocolatière-cabinet-bibliothèque, élévation profil de dos
(gouache, lápiz, tinta y rotulador sobre papel, 1969, 50 x 65,5 cm, 55.000 euros) de Salvador Dalí (1904-1989), comprado en Artcurial París en diciembre de 2003 por 28.000 euros, tras una salida 15.000-20.000 euros.
En pintura antigua, sobresale un Ecce homo (O/L, 134 x 108 cm, 25.000 euros) de Escuela italiana del XVII de calidad, y un desigual pero muy interesante Bodegón con cestas de frutas y verduras (O/L, 90 x 128 cm) de Escuela española o napolitana del siglo XVII por 48.000 euros, que parecen excesivos para no tener apellido.
Y poco más, pues varias obras más de calidad que se ofrecen han salido ya a pujas: de Anselmo Guinea (1855-hacia 1906), Joven con mandolina (acuarela, 1882, 70 x 50 cm, 6.000 euros, que salió ya en octubre de 2005 por 9.000 euros y en enero de 2004 por 7.000 euros); de José Arrúe (1885-1977), La hora del descanso (O/L, 128 x 128 cm, 10.000 euros, que se ofertó en enero de 2008 en Ansorena por 18.000 euros); de Elías Salaverría (1883-1952), Indiano en una romería (O/L, 1919, 123 x 273 cm, 50.000 euros, que salió ya en diciembre de 2008 por 60.000 euros); o de Francisco Domingo Marqués (1842-1920), Una fiesta bajo Luis XV (O/L, 1872, 277 x 426 cm, 150.000 euros, que ya habíamos visto en mayo de 2006 por 180.000 euros y en noviembre de 2000). Parece que la casa lleva un camino excesivamente errático.
Por último, la oferta de Subarna al día siguiente. Como suele ocurrir, la mayor parte de las obras son de raigambre catalana, de mayor interés para el público local. Entre las piezas, sobresale un brillante retrato debido al dibujo experto y seguro de 
Ramón Casas (1866-1932): Figura femenina (carboncillo, 58 x 46 cm) es un típico retrato de su mano, con la cara perfectamente recogida y el resto del cuerpo y del vestido apenas sugerido, como los que solía realizar para ilustrar la conocida y vanguardista revista femenina Pel i Ploma. El precio de 36.000 euros parece un tanto excesivo, pero quizá haya algún interesado. Veremos.
En una línea similar se sitúa el sencillo dibujo de Pablo Picasso (1881-1973) sobre una tarjeta postal: Sin título (Técnica mixta, 9 x 13,5 cm, 32.000 euros). Certificado por Maya Picasso, muestra la facilidad del malagueño para esbozar historias.
Y dentro del regionalismo, avanzado ya el siglo, dos obras: de Laureano Barrau (1864-1957), un Interior con figura (O/L, 82 x 68 cm, 6.000 euros), que salió ya a pujas en noviembre por 9.000 euros; y de Luis Graner
(1863-1929), La carta (O/L, 57 x 74,5 cm, 18.000 euros), con su virtuosismo lumínico y colorista habitual.
REMATES
Entre las piezas vendidas, además de las ya comentadas la semana pasada, sobresalió el lienzo de Domeniko Theotokopoulos, El Greco
, Cristo abrazado a la cruz, realizado hacia 1585 (O/L, 76 x 50,5 cm), que llevaba la galería Caylus. Como comentó uno de los galeristas, era “la mejor obra de El Greco aparecida en el mercado en estos últimos quince años”. La venta ascendió a 4,7 millones de euros, a un coleccionista europeo.
Siguiendo con la línea española, se pagaron unos 300.000 euros en Kunsthandlung Helmut H. Rumbler, de Frankfurt am Main, por el conjunto completo de La Tauromaquia, de Francisco de Goya. Pero el lienzo estrella de la feria, de la mano de Zurbarán, La fundación de la Orden de la Merced, ofertado por la galería galería Coatalem de París por unos diez millones de euros, no encontró comprador. Una pena, pues había varios interesados, entre particulares y fundaciones españolas; pero el precio era desorbitado. La pieza formaba parte de la serie pintada por el maestro extremeño para el Convento de la Merced Calzada, hoy Museo de Sevilla; el resto de piezas de ese retablo están dispersas entre los museos del Prado (dos), Franz Mayer (México), Cincinnati (Ohio, USA), Eccleston (Gran Bretaña) y otros de taller en la Catedral de Sevilla. El éxito no está tan sólo en ofrecer piezas magníficas, sino en acertar con el mejor precio.
Del siglo XVIII, destacaron las ventas del Hercules and the Stymphalian bird (O/T, 18 x 29 cm) de Gustave Moreau a un coleccionista americano en Jean-François Heim, de París, o la del Christ entering in Jerusalem (O/L, 100 x 142 cm) de Gustave Dore, vendido a otro coleccionista americano, esta vez por Jack Kilgore & Co., Inc., de Nueva York.
Ya en el siglo XIX, el pastel de Edgar Degas, 
Toilette matinale, 1864, fue vendido por la galería Dickinson, de Londres, mientras de Edouard Vuillard una tabla titulada Madame Vuillard reading in the nining room (O/T, 1903, 45 x 62 cm) cambiaba de manos por 500.000 euros en Montgomery Gallery, San Francisco, y Jeune Femme avec chapeau noir, un pastel fechado en 1915 de la galería Kunstgalerij Albricht bv, de Oosterbeek, hacía otro tanto por 350,000 euros.
La Galerie Thomas, de Munich, además del papel de Kandinsky vendido por 1,2 millones de euros, y del que ya hablamos la semana pasada, encontró comprador para una acuarela figurativa del reconocido Emile Nolde, esta vez por unos 350,000 euros. De René Magritte, representado con bastantes piezas en la feria, también hubo comprador : el óleo firmado en 1966, La Recherche de l’Absolu, se vendió en Ben Brown Fine Arts, de Londres. Y por útlimo, sobresalió también la venta del magnífico óleo de Lucio Fontana, Concetto Spaziale (noir) (Tm/L, 1962, 145 x 115 cm), esta vez a un coleccionista alemán que pagó por él 2,5 millones de euros a la Galerie Odermatt-Vedovi, de París.
Publicado por Daniel Díaz en La Gaceta de los Negocios el sábado 28 de marzo de 2009.